Los nueve talleres situados en Camagüey, Guáimaro, Cascorro, Sibanicú, Mola, Florida, Céspedes y Esmeralda laboran de manera ininterrumpida, de lunes a domingo, hasta cumplir la meta diaria con todo el personal de las diversas áreas inmersos en esa producción
Camagüey, Cuba, 22 ago.- Más de 117 mil prendas de uniformes escolares ha producido en la provincia de Camagüey la Unidad Empresarial de Base (UEB) Confecciones Caonex, de las 270 mil unidades comprometidas para el presente año.
En conversación con la Agencia Cubana de Noticias (ACN) María Antonia Pérez León, técnica de producción de la referida entidad, explicó que el sábado último concluyeron la entrega de 165 mil 394 prendas para el Ministerio del Comercio Interior (Mincin) y laboran en la confección de las 18 mil 535 destinadas a la Empresa Provincial de Abastecimiento y Servicios a la Educación (Epase) por representar una demanda priorizada para el inicio del curso escolar 2023-2024.
Los nueve talleres situados en Camagüey, Guáimaro, Cascorro, Sibanicú, Mola, Florida, Céspedes y Esmeralda laboran de manera ininterrumpida, de lunes a domingo, hasta cumplir la meta diaria con todo el personal de las diversas áreas inmersos en esa producción, y en el caso del taller floridano recibe apoyo del colectivo de la industria deportiva de esa localidad, puntualizó Pérez León.
Subrayó, además, que esta industria textil realiza contratos con otras provincias como es el caso de La Habana donde se enviaron tres mil 559 blusas para las estudiantes de politécnico, así como mil 050 pantalones para los alumnos de secundaria básica de Las Tunas y se labora para la entrega de 825 más, en la actual etapa.
En Caonex se confeccionan los uniformes según la demanda y el arribo de las materias primas, y los mecánicos de los talleres se encuentran preparados para ante cualquier interrupción resolver el problema en el menor tiempo posible.
La experimentada costurera Caridad Martínez Mercedes, con alrededor de 20 años de labor, asegura que es muy fuerte el trabajo al ser mayor la demanda, pero se deben al compromiso con los estudiantes para que tengan su uniforme, en tanto afirmó estar adaptada a este ritmo de trabajo, en un lugar que considera como su propia casa.
Para la joven Asmirsi Castillo Hinojosa, con 23 años de edad, quien labora en el centro desde sus 16 años, el gusto por la costura surgió desde niña y aconseja a las nuevas generaciones a desempeñarse en los centros productivos y ofrecer sus deseos de hacer e innovar en pos del desarrollo económico y social de la mayor de las Antillas.
Este colectivo agramontino cuenta con 402 trabajadores, de ellos 306 mujeres, las cuales además de la producción de uniformes para los grados de preescolar, quinto, secundaria y preuniversitario se encargan de los compromisos con sectores de máxima importancia como el Ministerio de Salud Pública, el Ministerio del Interior y Azcuba.
(ACN)