Cuando el arte de bailar crece

Loading

En diferentes escenarios danzan hoy los creadores agramontinos, reflejo de una larga tradición de artistas que lograron encumbrar a la región como uno de los principales espacios y canteras del arte cubano
Cuando el arte de bailar crece
Fotos: Internet

Por Diosmel Galano Oliver/Radio Camagüey *

Abril, 2024.- Es abril un mes donde el cuerpo todo se estremece y las emociones cobran diversidad de movimientos, el cuarto mes del año regala cada día 29 una jornada para exaltar a la danza y unir a la humanidad desde las diferentes formas y expresiones que alcanza.

Es Camagüey una tierra que sabe de bailes, donde su gente disfruta durante décadas la posibilidad de tener variedad de compañías exponentes de este arte, protagonistas que agasajamos hoy desde el intercambio de amores y saberes.

Lisandra Gómez de la Torre

ELLOS BAILAN, CREAN

“La danza es mi lugar de refugio, donde he podido liberar mis sentimientos más profundos, es la manera más cercana que tengo de poder hablar aunque no utilice palabras”, dice Lisandra Gómez de la Torre, bailarina, coreógrafa y directora del Ballet Contemporáneo de Camagüey.

En medio de los ensayos ante la inminente presentación y sobre el tabloncillo del Teatro Principal, confesó un claro afecto por la danza. “Siempre digo que es el momento donde puedo sentirme abrazada por el movimiento, donde he podido, no solamente expresar lo más profundo que hay en mí, sino convertirme en intérprete del sentir de otras personas”.

Desde muy pequeña Lisandra baila, característica que la une con varios de sus colegas pues el sacrificio desde las primeras edades distingue el camino de aprendizaje de la danza.

“Éramos muy niños cuando empezamos y la vida te cambia, cuando otros amigos tuyos de la cuadra juegan tú estás en un salón de clase o en un teatro”, dijo Regina Balaguer Sánchez, para quien el ballet es su vida. “La danza es mi punto de apoyo, mi escape; cuando uno está muy atormentado y con problemas siempre encuentra como un remanso en la danza. Considero que ese alimento espiritual que uno puede ofrecerle al público, con el que uno se nutre día a día en un salón de clase, en un teatro, nos hace la vida más llevadera, nos hace mejores personas, porque la danza mueve fibras interiores que te hacen pensar, alegrarte, entristecerte”.

Características que acompañan a la especie desde sus albores “no por gusto los ancestros danzaban a su manera para pedir la lluvia, que saliera el sol, porque la danza es parte intrínseca del ser humano”.

Por su parte Reinaldo Echemendía Estrada, director del Folklórico, considera que es el complemento de su trayectoria artística, “una carrera que comencé como músico de concierto, tocando en Sinfónica, en agrupaciones de cámara, como solista. Tengo el concepto de danza que es la música que se ve, viene a ser ese proceso que cuando hacía música sentía inacabado en mi integridad cultural; es esa expresión que va más allá del sonido abstracto, sin embargo la danza hace que la música pueda verse y por ello es indispensable en mi proyección de pensamiento cómo convertir a la música en un organismo, hacerla visible para que las personas disfruten a través del lenguaje del cuerpo, son personajes y sustentos en los procesos creativos, el espectáculo que llevo por dentro”.

Regina Balaguer Sánchez

LA CONTINUIDAD DEL ARTE

Estos tres creadores, líderes de importantes compañías que desde la Ciudad de los Tinajones enaltecen las artes escénicas de la nación, resaltan la importancia de formar a las nuevas generaciones en ese apego y compromiso con el arte.

“Tenemos que plantearnos nuevas metas -dijo Balaguer Sánchez, directora del Ballet de Camagüey-, diferentes aspectos a considerar para consolidar más la enseñanza y para que la danza siga teniendo un futuro promisorio, no solo en Camagüey, sino en el país. Estamos en la misma sintonía, solo falta agruparnos, unirnos y avanzar por un mismo camino; trabajar todos en pos del beneficio de la enseñanza artística para que el arte se mantenga como algo importante, que sostiene y mantiene el sistema social también, porque no por gusto el Comandante en Jefe dijo que lo primero que había que salvar era la cultura, porque es la idiosincrasia de los pueblos”.

Para lograr esta meta, Echemendía y el Folklórico tiene una fórmula cuando llega un nuevo integrante, “buscamos conseguir que tenga un sentido de pertenencia e identidad con lo que hacemos, porque la compañía en estos años ocupó un lugar en la escena nacional y foránea que descansa en una teoría desde la cual se sustenta la creación; les compartimos herramientas a usar, proyecciones que se ponen en función del bailarín que llega desde la escuela o desde otro ámbito”.

“Cuando uno baila cree que tiene toda la vida para hacer eso que amas, hasta que pasan los años y descubres que lo mejor ahora es brindar todo ese conocimiento a las nuevas generaciones -confesó Lisandra-, es gratificante verlos en escena, como crecen con cada uno de los detalles que uno pueda aportarles y ver cuando reciben el aplauso del público, también formas parte de ese momento tan agradable”.

¿NOS MUEVEN LOS RETOS?

“En momentos difíciles uno tiene que explotar la creatividad, estos son tiempos complejos, no solamente para los bailarines que se enfrentan a un día a día donde a veces no hay recursos, sino los directores nos tenemos que ingeniar para mantener viva una agrupación danzaria, pero mientras tengamos humanamente el deseo de hacer siempre va a existir la oportunidad de regalar una obra digna, lo que no puede faltar es el corazón en todo lo que hacemos”, formula muy segura la directora del Contemporáneo.

A lo que agrega Regina, “creo que en Camagüey la danza está en un buen momento creativo, de desarrollo; no obstante pienso que sí tenemos que afianzarnos y centrarnos más en el proceso de enseñanza porque esta ola migratoria debido a las condiciones económicas que tiene el país afecta a todos; pero si nos unimos, si consolidamos criterios, la danza puede avanzar”.

Reinaldo Echemendía Estrada

“Lo más importante es buscar y encontrar las recetas del sostenimiento y desarrollo de nuestra proyección para que sea asequible a todos, que puedan encontrar aquí identidad, inclusión, historia; como fuimos, somos y seremos. Que puedan entender -aún medio de esta farándula estrafalaria de acontecimientos- un arte de cultura de la resistencia y sea legado con la verdad y sentido de pertenencia a la identidad cubana”, puntualizó Echemendía Estrada.

En diferentes escenarios danzan hoy los creadores agramontinos, reflejo de una larga tradición de artistas que lograron encumbrar a la región como uno de los principales espacios y canteras del arte cubano.

Mantener esa creación desde un entorno alejado de la capital de la nación reviste mayores esfuerzos, por eso en el Día Mundial de la Danza la felicitación y el orgullo crece.

* Especial para el boletín Corte y pega del Consejo Provincial de las Artes Escénicas en Camagüey