Del futuro se habla en las calles de Cuba

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En la calle, muchos comentan las eventuales consecuencias de los cambios previstos para el 2024, pero al mismo tiempo reconocen que las medidas buscan impulsar la necesaria recuperación económica
Del futuro se habla en las calles de Cuba

La Habana, Cuba, 21 dic.- Las medidas económicas anunciadas por el primer ministro Manuel Marrero, son hoy tema de debate entre la población de toda Cuba, desde el aumento salarial para médicos y maestros hasta la actualización de precios del combustible.

Encargado de presentar las acciones previstas para 2024, durante el Segundo Período Ordinario de Sesiones de la Asamblea Nacional, el jefe de Gobierno informó de la buena nueva sobre pagos adicionales a los trabajadores de los sectores de la Salud y Educación, lo cual ha sido bien recibido por la ciudadanía.

Aseguró que, aunque no es posible subir los salarios a todos los empleados de esos sectores, la intención es elevar sus ingresos, la estimulación moral y el mejoramiento de las condiciones de trabajo y de vida.

En el caso de Salud se establecerá el pago por guardias nocturnas, remuneración adicional por exposición y complejidad, años de servicio y máximo esfuerzo. En la educación, recibirán pagos adicionales por antigüedad y sobrecarga docente.

Por otro lado, la decisión de subir el precio del combustible figura como una de las medidas más discutidas por la población, una transformación calificada por las autoridades de necesaria para organizar los desequilibrios internos del país,

Alberto, vendedor de dulces en una esquina del capitalino municipio de Plaza de la Revolución, comentó que el anuncio de esa disposición podría generar incrementos de precios de muchos servicios y el acaparamiento de productos.

Podría tener diversas consecuencias porque no hay sector de la economía ajeno al combustible, dijo.

Fueron unas cuantas las medidas anunciadas en busca de soluciones a los problemas nacionales, pero es quizás esta la más seguida entre los cubanos.

Acorde con las opiniones de numerosos especialistas, el impacto podría sentirse más en un país con creciente inflación, que intenta poner en orden su sistema económico y se enfrenta al bloqueo económico, financiero y comercial de Estados Unidos, el más grande y prolongado de la historia.

Pese a lo cual, los dirigentes cubanos mantienen el empeño de priorizar la sostenibilidad de los principales beneficios para toda la población, en especial entre los sectores más vulnerables.

Ante el Parlamento, el ministro cubano de Finanzas y Precios, Vladimir Regueiro, aseguró que la proyección de los gastos totales máximos para el 2024 es de 480 mil 707 millones de pesos, que representan un 37 por ciento de crecimiento.

Según los cálculos de esa cartera, tal cifra asegura los principales sectores y programas sociales como la Salud Pública, la Educación, la Cultura, el Deporte, la Asistencia y la Seguridad Social y también abarca demandas de financiamientos del sector empresarial y de gastos asociados a la deuda pública.

Regueiro detalló que para esas áreas priorizadas se destinará el próximo año el 63 por ciento de los gastos totales, lo que afianza, dijo, el marcado carácter social del presupuesto y los esfuerzos realizados en condiciones bien difíciles. Al intervenir en la Asamblea, Marrero resaltó el compromiso por continuar trabajando para elevar los indicadores de la economía nacional, y con ellos la calidad de vida.

En la calle, muchos comentan las eventuales consecuencias de los cambios previstos para el 2024, pero al mismo tiempo reconocen que las medidas buscan impulsar la necesaria recuperación económica.

(Prensa Latina)