Camagüey, 31 ene.- Con la satisfacción de ser testigo de relevantes momentos en el último cuarto de siglo en Camagüey, la Plaza de la Revolución Mayor General Ignacio Agramonte y Loynaz celebró este martes las dos décadas y media de existencia.
El acto de homenaje contó con la distinción del Comité Provincial del Partido, el Gobierno del Poder Popular a ese mismo nivel y otras organizaciones e instituciones del territorio por la labor desarrollada a lo largo de este tiempo.
De igual forma, el director de la Oficina del Historiador de la Ciudad (OHCC) otorgó a ese centro y a su colectivo un reconocimiento; mientras que cuatro compañeros de trayectoria excepcional fueron acreedores de la Medalla Conmemorativa XXV Aniversario de la OHCC.
En el agasajo el artista de la plástica Joel Jover entregó algunas obras a la institución, y tuvo lugar una cancelación especial de un sello postal por el aniversario.
María de los Ángeles Rodríguez, especialista principal del centro, afirmó que el emblemático sitio se considera el espacio de reunión social más importante del territorio, lo que se traduce en compromiso para su colectivo.
El sitio ha sido testigo de momentos trascendentales de la historia camagüeyana, como el discurso del Comandante en Jefe el 26 de julio de 1989, en el que, entre otras cuestiones, vaticinó la caída del campo socialista, recuerda un artículo publicado en el sitio web de la Oficina del Historiador de la Ciudad.
De igual forma, allí el Papa Juan Pablo II ofició su segunda misa en suelo cubano en 1998; y en el Salón Jimaguayú reposaron las cenizas de Fidel Castro Ruz en su tránsito al descanso eterno en el cementerio de Santa Ifigenia.
(Radio Cadena Agramonte)