Camagüey, Cuba, 20 ene.- Disponer de una Ley de Comunicación Social en Cuba constituye un imperativo para alcanzar una sociedad más democrática y justa, premisa que trascendió en el debate del proyecto de esa normativa en las provincias de Ciego de Ávila y Camagüey.
En la cita, con sede en el territorio agramontino, participaron diputados a la Asamblea Nacional del Poder Popular (ANPP), comunicadores sociales, periodistas, directivos de medios de prensa, profesores de carreras afines y personal en general vinculado a tales esferas.
A juicio de Daicar Saladrigas González, diputada al Parlamento y directora del periódico Adelante, se trata de un texto para toda la nación, pues está en correspondencia con los principios socialistas y las aspiraciones de un país próspero, por lo que no solo compete a especialistas y expertos de las mencionadas áreas.
A tono con lo anterior, Olga Hidalgo Santana, presidenta de la Asociación Cubana de Comunicadores Sociales en la demarcación, expresó la necesidad de profundizar en la legislación y ser promotores de su contenido, incluso en el ámbito comunitario, donde también tiene incidencia.
El profesor de la Universidad de Camagüey Ignacio Agramonte Loynaz, Roberto Pareta Beltrán, diseñador gráfico, sugirió la inclusión de la publicidad política o propaganda en el referido cuerpo legal, máxima en el contexto en que se desenvuelve la Revolución cubana y el asedio constante a que está sometida.
Al referirse a los asuntos de publicidad y patrocinio, Onelio Castillo Corderí, vicepresidente del Instituto Cubano de Radio y Televisión (ICRT), aseguró que los medios en la Isla seguirán siendo socialistas con vocación de servicio público.
Sobre tales prácticas expresó que constituirán fuentes adicionales de ingresos, pero nunca de carácter sustantivo, y con relación a ellas se enuncian condiciones como la no interrupción de programas para emitir dichos productos, y tampoco se hará en segmentos de espacios informativos o para los públicos infantil y adolescente.
La publicidad no es asunto nuevo en Cuba, añadió Castillo Corderí, pues se realiza en Cubavisión Internacional, en Radio Taíno y en el semanario Orbe, y constituye una fortaleza para materializar, por ejemplo, objetivos económicos y de desarrollo de la mayor de las Antillas, siempre desde la experiencia del Socialismo y con apego a lo establecido, de manera gradual y ordenada.
Otras intervenciones versaron en torno a la habilitación o formación de los profesionales de la Comunicación para un mejor desempeño a partir de las competencias adquiridas y a la importancia de expresar en la ley con mayor claridad responsabilidades de todos los actores de la economía cubana, incluyendo los de carácter privado.
Carlos Masid Castejón, diputado al Parlamento, casi al concluir el debate confesó que adquiere una preparación superior sobre la normativa, lo cual le brinda herramientas para cuando se desarrolle el debate en sesiones del legislativo, y agregó que esta es una ley necesaria para Cuba, que demanda del pueblo conocimiento sobre lo que en ella se establece.
Castillo Corderí aseveró que el texto se corresponde con uno de los tres pilares en que se sustenta la gestión de Gobierno en la nación, y aunque dialoga con prácticas internacionales, es fiel a la experiencia cubana y está ligado a valores como el diálogo, el consenso, la inclusión y la justicia social.
El encuentro, conducido por José Luis Toledo Santander, presidente de la Comisión Permanente de Trabajo de Asuntos Constitucionales y Jurídicos de la ANPP, contó, igualmente, con la participación de Martha Mesa Valenciana, presidenta de la Comisión Permanente de Educación, Cultura, Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente; Alfonso Noya Martínez, presidente del ICRT; y la vicegobernadora Carmen Hernández Requejo.
(Radio Cadena Agramonte)